El cacao, además de ser fruto de mazorca y grano, también es cultura y biodiversidad, es familia, igualdad y equidad. El cacao tiene mejor sabor si es libre de deforestación.
En Quito se realizón el tercer Encuentro de la Asociación Latinoamericana de Organizaciones de Pequeños Productores de Cacao (ALCACAO) realizado hace poco en Quito.
Con esta oportunidad también se lanzó, por primera vez, el concurso «Cacao de Oro Latinoamericano», edición 2022. Está dirigido a todas las organizaciones de pequeños productores de cacao fino de aroma de Centro y Sudamérica.
Objetivos
Sonia Guachizaca Aguilar, representante de ALCACAO y asesora legal de la Unión de Organizaciones Campesinas del Litoral, comentó que el objetivo del concurso es reconocer y valorar el esfuerzo y el trabajo de los productores de cacao y que la sociedad conozca que gracias a su labor se preservan los materiales nativos y se conserva la genética ancestral que permite obtener una diversidad de sabores de cada país bajo modelos de producción sostenible e inclusiva.
Asimismo, ofrecer y garantizar oportunidades de mercados nacionales e internacionales con incentivos económicos que permitan salvaguardar la diversidad del cacao en beneficio de toda la cadena de valor, desde las organizaciones de pequeños productores hasta el consumidor final.
En el proceso se seleccionarán a los diez mejores cacaos que representen la calidad y la diversidad latinoamericana en los mercados nacionales e internacionales, así como, en el Cocoa Awards 2023 del Programa Cocoa of Excellence para la chocolatería gourmet.
Normativa genera incertidumbre
En el foro, los productores de cacao debatieron sobre la propuesta de normativa europea para limitar la deforestación y sus posibles efectos para el cacao en América Latina. Esto en el sector genera incertidumbre.
Guachizaca manifestó que en el Ecuador hace falta fortalecer el sistema asociativo para enfrentar los desafíos que impone la actual coyuntura nacional e internacional. Desde el 2019, los cacaoteros forman parte de un proceso organizativo.
En los últimos años los productores han logrado superar algunas barreras, tanto así que los países a donde se exporta el cacao reconocen y valoran la labor por su producción limpia y que en muchos de los casos está certificada. Esto provoca que el productor se sienta motivado a obtener un precio justo. «En Latinoamérica apostamos por un cacao ético, solidario y justo», resaltó Guachizaca.
Origen del cacao en Ecuador
Una investigación arqueológica sugiere que el cacao se lo comenzó a cultivar en lo que ahora es la provincia de Zamora Chinchipe. Cerámicas encontradas que datan de hace cinco mil 500 años señalan la existencia de granos de cacao.
Foto: Julio Valencia (centro), representante de la UOPROCAE; segundo premio del concurso Salón del Chocolate de París.
ALCACAO se consolidó en abril de 2021 con el lanzamiento en Colombia; asistieron delegados de Ecuador, Perú y Guatemala.