Ana Lucía Delgado, gerenta de Oleaginosas del Puerto, considera que el procesamiento de soya para este año se realizará sin novedad, ya que la capacidad instalada en el país permitirá trabajar con este producto sin inconvenientes.
Indica que el Ministerio de Agricultura y Ganadería les ha informado que la producción de soya será de 61 704 toneladas, cantidad se podría procesar sin dificultades ya que en el caso de Oleaginosas del ¨Puerto; no se está utilizando toda la capacidad de sus instalaciones y pasa algún tiempo sin actividad, debido a la falta del producto.
La empresaria pide una sola cosa: transparentar la información sobre la producción. "Hay agricultores que dicen tener entre 5 mil y 7 mil toneladas, cuando solo disponen al momento de 300 toneladas y mencionan que el resto, supuestamente, está todavía en el campo", indica.
Delgado considera que hace falta un levantamiento técnico de la información para saber cómo está la producción en el país, aclarando que las cifras exactas se conocerán más o menos en diciembre. "Sería bueno que todo el tiempo conozcamos, mediante un monitoreo en el campo, de cómo está la producción de soya en el país para planificar actividades a futuro y mejorar esta actividad", dice.
Destaca el incremento de la producción de 61 mil toneladas de soya (cifra dada por el Ministerio de Agricultura y Ganadería), aspira que "así sea, y que se mantenga en los años siguientes y no que el próximo año sea 20.000 y el otro menos. "¿Qué hacemos ahí?", se pregunta.
Considera que no conoce con certeza si las cifras se van a cumplir, así no se puede planificar el futuro. "Es necesario inyectarle dinamismo al sector para mejorar sus condiciones. Lo importante es que el grano llegue, se procese, se consuma y continúe de esta manera la cadena; caso contrario, no se puede prosperar si tenemos actividad unos meses y luego se suspende la producción por un tiempo. Esa incertidumbre no permite trabajar con optimismo", indica Delgado.
Se requiere una preocupación constante del sector, de los industriales y de los organismos estatales, "no es que ya compramos la soya a los agricultores, lo almacenamos y el resto no es asunto de nadie", aclara.
Señala la gerenta que, al disponer datos exactos, la empresa procesadora podría implementar un proyecto de sustentación y ampliarse. "Si con el tiempo se demuestra que la producción de soya crece, no solo que ampliaríamos la planta; estoy segura de que mucha gente estaría dispuesta a invertir en otras plantas procesadoras".
Menciona que en la actualidad, el trabajo en la planta está reducido a tres o cuatro meses de funcionamiento, y "sería imposible pensar que, sin contar con cifras exactas, se podría hablar de una ampliación de la planta. Con el tiempo y si la producción del país crece, por supuesto, se podría pensar en una ampliación, siempre y cuando sea rentable: nadie invierte donde no hay una rentabilidad sustentable y sustentada".
Respecto a la calidad del grano que reciben, Delgado refiere que ahora existen centros de acopio, donde los productores secan la soya y ya no venden un grano muy seco o muy húmedo, como lo hacían años atrás. "Ha mejorado ese aspecto y ahora la soya llega con el 12% de humedad y el 1% de impureza", pese a lo cual también en la procesadora realizan una limpieza adicional, puesto que cuentan con una etapa de semidescascarado (donde se saca la cáscara del grano), de manera que este proceso mejora la calidad de la pasta.
Respecto al grano y a la pasta de soya importada, Delgado señala que, por un lado se impone aranceles para la importación del grano, pero la pasta de soya no tiene esas imposiciones, por tanto "no podemos importar el grano a costos altos, procesarlo y vender la pasta en precios más bajos, debido a la competencia que existe con la pasta importada sin aranceles".
Explica que al haber ampliado el diferimiento arancelario (liberación de impuestos) a la importación de soya hasta diciembre de 2019, mediante la resolución ministerial No.039 - 2016 del Comité de Comercio Exterior, genera un choque interno.
"El ingreso de pasta de soya, sin aranceles, internamente nos genera una brecha entre el precio internacional y el local, pero eso es hasta 2019, ya que posiblemente hayan acuerdos adicionales para salvar esta situación", dice.
Pese a los inconvenientes, Delgado afirma que Oleaginosas del Puerto está dispuesta a apoyar a los productores de soya y a los industriales. Reitera que la planta se encuentra operativa; han concluido todos los mantenimientos, "de tal manera que podemos trabajar sin problema; estamos prestos a brindar el servicio de maquila a quien lo requiera", señala.