El economista Rubén Flores, presidente del directorio de la nueva entidad bancaria, ante los requerimientos de la revista Maíz & Soya, puntualiza el marco referencial y los principales aspectos que caracterizan el accionar en estos primeros 17 meses de actividad.
El alto ejecutivo destaca que BanEcuador, ha captado hasta esta fecha, 1 107 millones de dólares, colocó créditos por 924.8 millones en 256 328 operaciones; lidera la concesión de microcrédito del sistema financiero nacional, que incluye a bancos privados, cooperativas de ahorro y crédito, mutualistas, sociedades financieras, bancos públicos. Más del 50% de la colocación se destina a créditos pecuarios y agrícolas, seguido con el 17% para el comercio y el 12% en créditos de desarrollo humano.
Con el Decreto Ejecutivo 952 del 11 de marzo de 2016, se estableció la liquidación voluntaria del ex Banco Nacional de Fomento y la transferencia de sus activos, pasivos y patrimonio al BanEcuador, nueva entidad bancaria. BanEcuador, entidad distinta al ex BNF en liquidación, asumió un segmento de la cartera que merecía una dedicación especial por parte de la Ley Orgánica para la Reestructuración de la Banca Pública, Banca Cerrada y Gestión del Sistema Financiero Nacional y Régimen de Valores, que busca sanear este segmento de deuda con el ex Banco Nacional de Fomento.
BanEcuador se encuentra en operación como banca pública para el desarrollo, cuya tarea de intermediación financiera y la prestación de servicios no financieros, definidos en su política de gestión social; está facultado para realizar todas las operaciones determinadas en el artículo 194 del Código Orgánico Monetario y Financiero, con autorización de la Superintendencia de Bancos.
Esta nueva administración de BanEcuador se ha planteado como finalidad de servicio público, servir y servir bien, haciendo crecer social y económicamente a sus clientes a través de mecanismos eficientes, transparentes y de grata recordación. Quienes han acudido desde la fecha de apertura, han recibido los nuevos documentos (cartolas), certificados de depósito o libretines de cheques con lo cual han pasado a ser beneficiarios del nuevo banco público. Los oficiales de negocio levantan la información en los entornos productivos y de vivienda de los ciudadanos. Esto permite conocer de cerca sus reales necesidades y atenderlas de forma ágil. Para los créditos de hasta 20 mil dólares, no se solicita garantías reales como hipotecas o prendas, sino simplemente una firma solidaria. Esto evita que el campesino tenga que hipotecar su tierra o realizar difíciles trámites para garantizar el crédito. Para presentar una solicitud basta la cédula de identidad, papeleta de votación, una planilla de servicio básico, luego un oficial de negocios guía al ciudadano hasta que pueda alcanzar su crédito. Como banca pública está en condiciones de entregar el dinero solicitado en un plazo promedio de cinco días.
Se debe destacar que el Banco ha diseñado productos de crédito específicos para asociaciones y organizaciones comunitarias. Esto es fundamental para apoyar los encadenamientos productivos y agregar valor a los productos primarios y fortalecer la asociatividad.
Ahora, los servicios son mucho más ágiles que en el pasado. El trabajo articulado con todas las instancias de Gobierno que promueven el desarrollo y bienestar, permite conocer de cerca las necesidades de financiamiento para las distintas actividades. Esta cercanía y el levantamiento de información en territorio agilita la aprobación de los créditos. Gran parte del trabajo se cumple en territorio, y este es un avance significativo: existe atención personalizada para evitar costos de movilización y alimentación al ciudadano, únicamente se debe acudir al banco para realizar los trámites estrictamente necesarios como la apertura de cuenta y la liquidación del préstamo.
El crédito que entrega BanEcuador cuenta con el respaldo del Seguro Agrícola, en articulación con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), que tiene el propósito de proteger las inversiones que se realizan en el agro y de esta manera apoyar a los campesinos para mitigar las consecuencias de plagas, sequías o exceso de lluvias. Este seguro se suma a los esfuerzos que realiza la institución para brindar oportunidades a los campesinos para que sus proyectos productivos rindan los resultados que esperan, lo cual garantiza en buena medida, que puedan cumplir con sus obligaciones de pago.
BanEcuador, tiene un rol importante en el Programa Toda una Vida impulsado por el Gobierno Nacional, con el financiamiento a los ciudadanos para que puedan acceder a este programa, además de otras propuestas como Casa Para Todos, Banco del Pueblo, Impulso Joven y la Gran Minga Agropecuaria, siendo esta uno de los ejes principales del proyecto del Gobierno cuya ejecución le corresponde al Ministerio de Agricultura y Ganadería, entidad con la que se coordinan los productos y servicios bancarios y no bancarizados para financiar los proyectos agropecuarios.
Se planteará una tasa de interés de un dígito como un incentivo para los buenos pagadores. En todas las circunstancias, los productos de crédito de BanEcuador son flexibles para adaptarse a los más diversos requerimientos.
Las tasas de interés dependen del marco regulatorio del sistema financiero nacional, así como del monto, plazo y destino de la inversión. En algunos casos, se manejan tasas desde el 9.76%. En su mayoría de segmentos el interés de la banca pública es inferior al de la banca privada. Hay que considerar que el éxito de los proyectos productivos no depende necesariamente de la tasa de interés, sino del acompañamiento que con los servicios no financieros que se brinda, en articulación con distintas instancias de Gobierno central, los gobiernos autónomos descentralizados y los actores de la economía popular y solidaria. Como banca pública para el desarrollo, se busca la consolidación de las organizaciones y asociaciones para lograr encadenamientos productivos y cadenas de valor.
Uno de los mayores esfuerzos que desarrolla como banca pública es motivar la corresponsabilidad de los ciudadanos con las obligaciones que contraen al recibir un crédito. El programa de Educación Financiera trabaja con organizaciones, asociaciones, cooperativas productivas y otras instancias de la sociedad organizada, motivando la importancia del ahorro, así como la necesidad de honrar los compromisos de deuda.
Es satisfactorio constatar que los sectores productivos van dejando de lado ideas como, por ejemplo, no pagar sus créditos, esperando una condonación o alguna solución similar. Los índices de morosidad en BanEcuador, se encuentran dentro de las regulaciones que para el efecto rigen al sistema bancario. La cartera vencida ocupa un minúsculo rango en toda la cartera de BanEcuador, no alcanza los 16 millones de dólares, frente a una cartera total cercana a los 1 177 millones. Esto evidencia la corresponsabilidad ciudadana frente a la banca pública.
Uno de los enfoques de BanEcuador, es buscar soluciones personalizadas para quienes suspenden sus obligaciones de pago. Siempre habrá soluciones para honrar los pagos; se puede reestructurar la deuda, buscar asesoría técnica con el propósito de levantar sus proyectos productivos. Lo importante es no caer en mora, sino pedir el apoyo del banco para atender sus pagos.