PRIMERA PARTE
DE ACUERDO CON EL ARTÍCULO CIENTÍFICO “100 AÑOS DE LA HARINA DE SOYA”, DE AUTORÍA DE NELSON RUIZ Y OTROS INVESTIGADORES ESTADOUNIDENSES, SON TRES LOS FACTORES QUE HACEN QUE LA HARINA DE SOYA SEA TAN ATRACTIVA PARA LA ALIMENTACIÓN ANIMAL “LA DIGESTIBILIDAD DE LOS AMINOÁCIDOS, LOS NIVELES DE FACTORES ANTINUTRICIONALES Y LOS CONTENIDOS DE ENERGÍA METABOLIZABLE Y NETA”
En este sentido, “en comparación con otras fuentes proteicas, la harina de soya ha demostrado consistentemente que contiene menos variabilidad de nutrientes, niveles manejables de factores antinutricionales, y una mayor digestibilidad de aminoácidos y energía metabolizable”.
Estos son, por tanto, los principales disparadores de un crecimiento acelerado en la producción y utilización de la soya en alimentación animal durante el último siglo, es así que “el aumento constante de la producción y de la utilización de la harina de soya refleja, por un lado, el aumento paralelo de la producción de proteína animal (sobre todo de aves y cerdos) y, por otro, el valor nutritivo superior (relación precio/calidad) de la harina de soya con relación a otras fuentes proteicas”.
“En los últimos 50-60 años la harina de soya se ha convertido en el ingrediente de referencia para la evaluación de los piensos, en particular de los ingredientes proteicos.
SIN EMBARGO, PARA MAXIMIZAR EL VALOR NUTRITIVO, LA HARINA DE SOYA -MÁS QUE CUALQUIER OTRO INGREDIENTE- SE BASA EN UN PROCESO TÉRMICO PRECISO, EVITANDO EL SUBPROCESAMIENTO Y EL SOBREPROCESAMIENTO”.
Es por ello que “la investigación con harina de soya alimentada a cerdos en los últimos 50 años se ha centrado principalmente en las siguientes áreas: (1) Mediciones de la digestibilidad ideal de los aminoácidos. (2) Determinación del valor energético. (3) Determinación del valor de fósforo digestible. (4) Rendimiento de cerdos alimentados con dietas basadas en harina de soya. (5) Desarrollo de productos de soya que pueden ser alimentados a cerditos.
El aprendizaje en estas áreas no solo ha beneficiado a la industria porcina, sino que también ha ayudado a comprender la alimentación de otras especies con harina de soya”.
“Los principales logros de los últimos 50 años en lo que respecta al entendimiento del valor de los aminoácidos de la harina de soya fueron la estandarización de un procedimiento para determinar la digestibilidad ileal de cada aminoácido, la comprensión del concepto de la utilización de la digestibilidad ileal estandarizada de los aminoácidos en la formulación de dietas y la constatación de que la digestibilidad ileal estandarizada de los aminoácidos en harina de soya es mayor que en la mayoría de las demás fuentes proteicas vegetales.