La nutrición para la cerda moderna, la afectación de los microclimas dentro de la granja, la forma del comedero o bebedero y su influencia en la alimentación durante la gestión, bajo un escenario de impacto económico, fueron algunos de los ejes que abordó Alejandro Córdova.
Enfatizó que en estos casos se debe observar con detalle la condición corporal de la hembra, y cuáles son las herramientas que se deben aplicar en el momento de alimentar a la cerda, sin descuidar la afectación de los microclimas dentro de la granja, principalmente durante el último tercio de la gestación, y cómo estos factores influyen en el momento de medir los pesos del destete.
“En la condición corporal está la clave para determinar si se puede alcanzar el potencial genético”. ¿Cada qué tiempo se está evaluando este factor? ¿Qué herramientas se utilizan para validar esa condición corporal?
Esta es una de las preocupaciones que debe tener en cuenta el productor para garantizar la rentabilidad de la actividad. Para que la inversión que se ha realizado en una reproductora de sus frutos, se requiere llevarla a un tercer parto.
También se debe intentar que la tasa de retención de las hembras, sobre encima del tercer parto, alcance entre el 75 y 80 por ciento. Sin embargo, en su charla, Córdova advirtió que generalmente esto no es observado por los productores.
“Para que la inversión que hemos hecho en una reproductora se pague, por lo menos necesitamos llevarla hacia una tercera paridera”, explicó.
HÉCTOR ANZOLA: DIAGNÓSTICO Y PREVENCIÓN DE PATOLOGÍAS POR MICOTOXINA
Héctor Anzola, en su conferencia sobre diagnóstico y prevención de patologías por micotoxina en la producción porcina, detalló que este es un problema que siempre está latente en el alimento de estos animales y se originan de tres tipos de hongos, entre ellos el fusarium y penicillum.
Estas toxinas generan, por ejemplo, las aflatoxinas que se producen en algunos cultivos agrícolas y que se relacionan con un mayor riesgo de cáncer de hígado y diversos problemas a nivel de órganos de los animales una vez que traspasan la barrera del tracto intestinal.
Otro de los procesos internos afectados es el sistema inmune ocasionando una inmunosupresión generalizada; adicionalmente permite la entrada a otro tipo de patógenos sean bacterias o virus.
Las herramientas para la prevención que se pueden encontrar en el mercado son los antifúngicos o captadores de micotoxinas, que actúan de acuerdo a su composición para evitar un efecto dañino en los animales.
Para este expositor, el control de la alimentación y la bioseguridad es sumamente importante, por que el productor porcícola debe observar detenidamente para evitar contratiempos. “Los nutrientes son absorbidos en el aparato digestivo; un órgano muy complejo y que está íntimamente vinculado con el sistema inmune de los animales, ya que la mayor parte del tejido linfoide se encuentra en este órgano”.
A esto se suma la trazabilidad que permite tomar decisiones respecto de la existencia de alimentos contaminados o no, cómo utilizarlos, y en qué animales. Las recomendaciones también van dirigidas a quien produce la materia prima.