Temas de salud aviar y producción se analizaron en la VIII Jornada Avícola “Por una avicultura responsable y prudente” organizada por la Red Alimentaria.
El gerente de CEPA, Carlos Sinesi, resaltó que “esta jornada ya es un clásico de la avicultura” que aborda temas que le interesan al sector.
La VIII Jornada Avícola “Por una avicultura responsable y prudente” estuvo dirigida a todos los actores de la avicultura: trabajadores de granjas, plantas de incubación, de abuelas y reproductoras, de plantas de alimentos, distribuidores y toda la cadena comercial, proveedores de la actividad, docentes, alumnos y más.
“Entendemos que la avicultura tiene muchas responsabilidades y actúa prudentemente frente a tantos desafíos que debe afrontar”, dijo Isidro Molfese, mentalizador de la jornada, y detalló que uno de ellos es el uso de antimicrobianos para evitar la posibilidad de ser parte de una cadena que está creando un nivel de resistencia a los mismos y que “preocupa seriamente”.
Pero aclaró que, como no se puede dejar de aplicarlos por la acción terapéutica en casos específicos, la avicultura los emplea en forma prudente y con autorización estatal.
Fortalecer la economía circular
Bajo el patrocinio de la Universidad Nacional de Córdoba (Argentina), Paola Campitelli habló del “Protocolo para la gestión de cadáveres animales” donde abordó la temática de las normativas existentes en Córdoba en relación a la gestión de cadáveres de animales provenientes de sistemas intensivos de cría de producción con enfoque particular en la producción aviar.
Explicó que, un manejo adecuado tiene que ver con evitar la propagación de enfermedades infecciosas incluidas la zoonóticas y proteger la calidad del aire, agua y suelo en los establecimientos de cría mediante operaciones seguras, aceptables y ambientalmente responsables apuntando a alternativas que generen un valor agregado a los residuos para lograr el desarrollo de la economía circular.
Así hizo referencia a la importancia del cuidado de la salud humana, bienestar animal y el cuidado del ambiente y llamó la atención a incrementar iniciativas para fortalecer el concepto de economía circular (reciclaje) en contraposición con la economía tradicional, cuyo objetivo es implantar una economía basada en el principio de “cerrar el ciclo de vida” de los productos, y al mismo tiempo produciendo bienes y servicios, a la vez que se reduce el consumo y desperdicio de materias primas, agua y energía.
Esto supone una intersección de los aspectos ambientales y económicos donde los productos deben extender su vida útil y finalmente cerrar el círculo, siendo reutilizados. Esto, con el objetivo de proteger la salud humana, los recursos naturales, la producción animal y la preservación de la calidad de los alimentos y materias prima de origen animal. Dijo que estas nuevas normativas se sustentan con el impulso político de la Secretaría de Ambiente de la provincia de Córdoba.
La producción avícola debe ser lo más adecuada posible, porque de ella depende la salud humana.
Programa de manejo integrado de plagas
“¿Cómo impactan las moscas en la producción pecuaria? Diagnóstico e implementación de estrategias de manejo” fue la conferencia que dictó Hernán Funes.
Subrayó que, cuando se habla “coloquialmente de moscas” hay que referirse a las más de 25 especies diferentes de dípteros, cada una de las cuales posee características y particularidades propias que las destacan, por ejemplo, la mosca doméstica se destaca por sobre el resto, ya que representa una gran amenaza a los sistemas productivos afectando directamente los rendimientos.
Durante su disertación, el Gerente de Negocios Internacionales de Chemotécnica abordó los aspectos básicos sobre la biología de esta plaga para la correcta implementación de herramientas específicas de monitoreo, control dentro de un programa de manejo integrado de moscas, e identificar los sitios de cría.
Con bioseguridad en galpones, agua limpia, etc. termina el ciclo biológico de las plagas, recomendó este especialista. “En este entorno, la mosca tiene menos comodidad para volar y proliferar en las producciones pecuarias”.
Las enfermedades y determinadas bacterias, microorganismos y hongos también están asociadas con esta especie de plaga que afecta de manera significativa a la economía de la actividad pecuaria, y pueden dañar hasta un 10 % en la tasa de crecimiento. Un manejo integrado de moscas consiste en realizar una serie de acciones como uso de larvicidas, tratamientos residuales, y trampas.
Micotoxinas: gestión responsable y prudente
Con el auspicio de AMLAN International, Carlos Mallmann habló de la importancia del maíz en la cadena alimentaria de las aves de corral con respecto a las micotoxinas, y puso énfasis en las principales y su prevalencia en los cereales, a través de la presentación de estadísticas de los últimos 30 años.
Una gestión responsable y prudente requiere resultados basados en muestras fiables obtenidas de la producción de piensos y silos; además el productor debe preocuparse por tener una cosecha adecuada con el volumen que requiera.
La nutrición en las aves debe ser lo más perfecta posible lo que redundará en la reducción de los costos. Para preservar lo que se cosecha, el almacenamiento en los silos también debe estar de forma adecuada.
En su exposición resaltó la importancia del uso de esta información para calcular el riesgo y, en consecuencia, tomar una decisión económica sobre el uso de aditivos antimicotoxinas.
El 70 % de las muestras de maíz tienen una o más micotoxinas que además suponen altos costos de producción. También es importante innovar en el tema de gestión para llegar con un alimento seguro a las aves y a través de ellas a los consumidores.
Salud intestinal de las aves
“Probióticos, más allá de la exclusión competitiva. ¿Cómo ayudan a optimizar la salud intestinal de las aves? fue la disertación de Sandra Bonaspetti.
Bajo el patrocinio de Phibro Salud Animal, se refirió a los beneficios del uso de probióticos en la alimentación de pollos de engorde. Estos aditivos alimentarios vieron incrementado su uso en Europa y Estados Unidos cuando la producción de pollos libres de antibióticos cobró importancia, debido a la demanda del mercado consumidor. En la actualidad, solo en el 27 % de los pollos producidos en la Unión Europea, se usan antibióticos en la incubadora o en el agua.
Señaló que los productores necesitan soluciones integrales y efectivas para reemplazarlos en sus producciones y que se vean libres de antibióticos. En Estados Unidos aumentó del 3 %, de 2014, al 52 %, en 2020, la producción sin uso de antibióticos.
Estas tendencias de producción avícola sin antibióticos promotores de crecimiento se iniciaron por la elección del consumidor quien al momento de comprar carne de pollo observa “atributos” en el ave. Así, el 54 % de los consumidores compran pollos producidos sin antibióticos, el 50 % compran pollos producidos localmente (en el país o región donde habitan los compradores), para el 46 % es muy importante el país de origen de la producción de los pollos marcados en las etiquetas.
Los principales desafíos a enfrentar son los coccidios y la enteritis necrótica. El uso de antibióticos ha ocasionado que empeore la salud intestinal de las aves, que está relacionado con la crianza y la alimentación, la calidad del agua, de la cama, la densidad de población y el estrés fisiológico.
Un intestino sano regula la capacidad de otros órganos para evitar infecciones. En su conferencia Bonaspetti mostró cómo los probióticos son efectivos para mejorar la salud intestinal de los pollos y, por lo tanto, cómo pueden ayudar a mejorar los rendimientos en la producción avícola.
Uso de saponinas
Gerardo Roulet, de la Universidad de Buenos Aires, y asesor de la firma BioAromas Latinoamérica, expuso las ventajas del uso de saponinas de origen vegetal en ponedoras y parrilleros.
Este especialista explicó que el uso de aditivos, como las saponinas, tienen variados usos a la hora de suplantar antibióticos en la producción de origen animal. “Lógicamente emplear solo saponinas no va a solucionar todos los problemas; esto tiene que venir acompañado de buenas prácticas de manejo para controlar los parámetros posibles en la producción pecuaria como la avicultura”, señaló.
Las saponinas o extractos vegetales son glicósidos triterpénicos con propiedades surfactantes. En ocasiones también viene acompañado de glicocomponentes que son moléculas complejas termoestables que incluyen algunas unidades de azúcares y glucósidos. Las saponinas, que se caracterizan por tener gusto amargo, poseen un sistema de defensa que evitan la flora bacteriana y se extraen de diferentes especies vegetales, como la espina corona, yuca, quillaja y quinoa.
Estos compuestos se usan para repeler o evitar de alguna manera que sean consumidos por insectos o herbívoros. Las saponinas producen una modulación de la flora intestinal, al afectar la permeabilidad de las membranas celulares de los microorganismos inhibiendo su reproducción y favoreciendo la absorción de nutrientes.
Tienen un efecto inhibitorio de ureasas en intestino, con lo cual disminuyen la concentración de amoníaco intestinal; además, son capaces de unirse al amoniaco disminuyendo la concentración y transformándolo en compuestos nitrogenados no tóxicos mejorando la digestión.
La saponina se deriva del latín “sapón”, que significa “jabón” y tiene la particularidad de formar espuma en soluciones acuosas; tiene actividad hemolítica y no se absorbe en el intestino, y poseen efectos antiinflamatorios y antimicóticos.
Iluminación para ponedoras comerciales
En su conferencia “Planes de iluminación en ponedoras comerciales”, Leonardo Leiva, representante de Hy-Line en Argentina, destacó que este es un tema “importantísimo” en la producción avícola.
Empezó rememorando que en la década de los 50 y 60, el sector productor de aves estaba muy lejos de entender las relaciones complejas entre el manejo de la luz, su intensidad, temperatura de color, diferentes programas, entre otros.
Destacó que la visión de las aves es el más importante de los sentidos, pues tienen ojos más grandes en relación al tamaño corporal; el ojo izquierdo lo usa para la visión de lejos. Cuando está en alerta, las aves inclinan la cabeza para mirar por el ojo izquierdo, es decir, la percepción visual de las aves es diferente.
Con estos antecedentes, Leiva señaló que los productores deben tomar en cuenta el término de cromaticidad que es la medición objetiva de una fuente de luz independientemente de su intensidad luminosa.
El índice de reproducción cromática es la medida utilizada en relación a una fuente de luz para medir su capacidad de mostrar los colores de un objeto de manera real tomando como referencia la iluminación natural.
Este especialista expuso que una mejor visión mejora el bienestar animal, reduce el estrés y la mortalidad y conlleva a un mayor rendimiento zootécnico. Las reglas de oro del manejo de luz son: no aumentar la luz en la fase de crianza, no reducir la luz en producción, y menor intensidad en la recría.