"Estos animales dañan los alimentos y pueden generar enfermedades al consumidor; es mejor tomar medidas a tiempo", recomendó en su intervención online, Domingo Yanucci, director de Consulgran y de la revista Granos.
Cuarenta especies de insectos y ácaros afectan a los granos y otros productos almacenados en la actualidad. Entre ellos están gorgojos, taladrillos, carcoma grande, achatada, dentada, bruchos, palomitas, polillas, piojos, etc., además de las aves (palomas) roedores y los microrganismos que siempre acompañan a los granos.
Es casi imposible pensar en un grano sin insectos, por eso se deben tomar las medidas de manejo necesarias, porque el objetivo es lograr un grano sano, seco, limpio y frío, señaló Yanucci.
Estas plagas individualmente poco devoran el grano, pero tienen gran poder de multiplicación. Por ejemplo, una hembra de gorgojo (Sitophilus spp) produce 200 huevos en poco tiempo y en buenas condiciones de temperatura, el ciclo completo de huevo a adulto demora apenas 30 días.
Además de consumir el grano, las plagas contaminan con sus excrementos y partes del cuerpo; generan calentamientos y potencializan el deterioro. Igualmente, transmiten enfermedades; disminuye el poder y energía germinativa de las semillas y su potencial alimenticio; es decir, las plagas se comen lo mejor del grano.
Yanucci indicó que la contaminación del grano puede afectar la salud del consumidor porque las plagas transmiten enfermedades, favorecen el desarrollo de hongos que son productores de micotoxinas.
Los insectos tienen una gran capacidad para multiplicarse
No existen medios prácticos para identificar la infestación oculta del insecto dentro del grano. Únicamente se puede realizar con muestreos, trampas, etc. Yanucci dijo que en un marco de economía y seguridad, es imprescindible capacitar a los que manejan los granos y disponer de las instalaciones mínimas adecuadas.
Para almacenar los granos de manera correcta, se debe partir de un acertado o muestreo, conocer el grano, clasificarlo y aplicar un manejo adecuado. "Siempre es recomendable la prelimpieza; el secado en forma no agresiva, la conservación con frío y, en los casos que sea posible, emplear tratamientos preventivos", manifestó.
Cuando el grano se contamina, las pérdidas pueden llegar a ser totales. En las plantas de silos industriales, el daño en peso normal se encuentra en el orden del 1 a 2%, pero esto se traduce en un 10 al 20% de reducción de la capacidad nutricional del grano. A nivel de agricultura de subsistencia, el perjuicio es mayor. Actualmente, existe tecnología de vanguardia para contrarrestar las diferentes plagas, aseveró Yanucci.
Además de clasificar el grano es indispensable su adecuado manejo.
mutando y se vuelven resistentes. Las más tolerantes dejan descendencia y poco a poco, las nuevas generaciones resultan más agresivas.Yanucci recomendó a los agricultores una adecuada y profunda limpieza de los lugares donde se almacenen los granos, el monitoreo permanente, la capacitación al personal y la selección de la tecnología disponible en el mercado, para evitar pérdidas cuantitativas y cualitativas.
Medidas para detener la propagación
Control integrado de plagas post-cosecha, que implica medidas físicas, legales, culturales y químicas. La limpieza y el frío son dos grandes enemigos de las plagas. Las plagas solo desarrollan resistencia a productos químicos porque las bajas temperaturas las inmoviliza y cortan su ciclo, por lo tanto, no se reproducen y no consumen.