Especialistas y voluntarios de KOPIA e INIAP investigan técnicas de producción hortícola, evaluación de semillas, sistemas de propagación y técnicas de producción bajo invernadero.
Para promover la investigación agrícola entre Ecuador y Corea del Sur, hace ocho años se inauguró el Programa Coreano Internacional para la Agricultura, KOPIA (por sus siglas en inglés), en la Estación Experimental Santa Catalina del Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias (INIAP), adscrito al Ministerio de Agricultura y Ganadería.
Desde entonces -con fondos del gobierno coreano- especialistas y voluntarios de las dos instituciones, investigan técnicas de producción agrícola para apoyar el desarrollo rural, manejo y producción de viveros hortícolas en el país.
Los beneficiarios de este programa están agrupados en 25 organizaciones distribuidas en las provincias de Carchi, Imbabura, Pichincha, Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo, Bolívar, Guayas y Los Ríos.
Alrededor de un mil 500 agricultores de subsistencia se han beneficiado hasta el momento de esta iniciativa, aunque el objetivo de KOPIA es llegar por lo menos a dos mil 500 agricultores directos y cinco mil indirectos.
Alicia Villavicencio, técnica de la organización, indicó que se mantiene un trabajo, en cierta forma, personalizado, e indicó que KOPIA también intercambia expertos y voluntarios para entrenarlos en las áreas del proyecto. “Así se fortalece el proceso de cooperación”, señaló.
Una de las fortalezas del proyecto también es trabajar en diferentes rubros como maíz, arroz, trigo, cebada y aguacate. “Son agricultores con extensiones de terreno muy reducidas, a los que se les acerca tecnologías para desarrollo comunitario y de asociatividad, a fin de que incrementen su productividad, y que sus ganancias les permitan autosustentarse”, agregó Villavicencio.
El Centro KOPIA ayuda a los agricultores a auto sustentar sus necesidades y a desarrollar nuevos recursos agrícolas enfocándose en los principales cultivos de una región.
Alianza con INIAP
KOPIA se apoya en la tecnología que ofrece el INIAP, con el que ha fomentado varios proyectos: maíz, cereales, transferencia de tecnología para cubrir otros cultivos, entre los que está también el arroz; adicionalmente se estableció un sistema de producción de semillas de papa libre de virus, para aumentar la producción de este tubérculo.
A esto se suma la producción de aguacate de la variedad Fuerte en las parroquias Guayllabamba y Atahualpa (Pichincha); y, de la variedad Hass, en Cotacachi (Imbabura) y otras localidades de Chimborazo.
En el pasado junio se efectuó un proceso de intercambio de productos entre los agricultores del cantones Maná (Cotopaxi), y Mejía (Pichincha).
Este sistema que se basa en uno de los modelos comerciales más puros y espontáneos, fue aplicado con excelentes resultados que garantizan no solamente un comercio más justo, sino que abre la posibilidad de un mayor y mejor conocimiento de la producción agrícola familiar.