Durante más de medio siglo y con el propósito de producir más y de manera competitiva, se han utilizado los antibióticos que promueven performance en la nutrición animal.
El empleo de antibióticos en la alimentación animal ha sido objeto de debates y discusiones en el mundo, debido a la posibilidad de la presencia de residuos de antimicrobianos y sus metabolitos en productos de origen animal; la probable selección de bacterias y la aparición de resistencia a los antibióticos en bacterias patógenas.
Frente a esto, la industria avícola busca alternativas al empleo de antimicrobianos, para mantener la misma eficiencia productiva que brindan los promotores antimicrobianos tradicionales, reduciendo el riesgo de inducir resistencia microbiana.
En este escenario, es necesario adoptar estrategias holísticas dentro de la producción animal y programas, que involucren diferentes estrategias de bioseguridad, manejo, nutrición, y capacitación de los profesionales involucrados. También destaca la utilización de tecnologías para reemplazar antibióticos que promueven el crecimiento, como probióticos, prebióticos, ácidos orgánicos y aceites esenciales, que promueven el equilibrio del microbioma, manutención de las estructuras intestinales que genera mejoría en la salud de los animales para un mejor equilibrio.
Existen varias soluciones a los desafíos que presenta la producción de matricespesadas. En la actualidad se utilizan:
Ácidos orgánicos: hay diversidad de ellos, con diferentes propiedades físicas y químicas, mediante vía agua o alimento, disponibles individualmente o en combinaciones. Puede combatir a los microorganismos, las bacterias, y pueden ayudar a reducir la presencia de Salmonella en el intestino de pollos de engorde.
Aceites esenciales: son una mezcla compleja de metabolitos vegetales secundarios, como terpenoides, fenilpropenos de bajo punto de ebullición, alcoholes, aldehídos, ésteres cíclicos, etc.
Los modos de acción de estos aceites, para mejorar el rendimiento de las aves y participar en programas alternativos de promotores del crecimiento, son: efecto antimicrobiano; estimulación de las enzimas digestivas; acción en la morfología gastrointestinal; y, digestibilidad.
Además, existen los probióticos, que se determinan como complementos alimenticios en base de microorganismos vivos, que afectan de forma beneficiosa la salud animal, mejorando el equilibrio de la microbiota.
También están los prebióticos, que se definen como componentes no digeribles de la dieta que influyen en la microbiota animal a través de una estimulación selectiva del crecimiento y/o acción metabólica de bacterias beneficiosas que están presentes en el tracto gastrointestinal animal y que suprimen las bacterias patógenas.
Los prebióticos comúnmente utilizados en las aves de corral son los oligosacáridos, entre los que se encuentran la inulina, los fructooligosacáridos (FOS), los mananoligosacáridos (MOS) y los galatoligosacáridos (GOS), entre otros.