El software X-Streamer, una incubadora inteligente, está en capacidad de medir la temperatura de la cáscara de los huevos y la controla.
Rudy Verhelst, director de Desarrollo Empresarial de Petersime, presentó una nueva tecnología que promete mejorar el rendimiento de incubación con una consistencia de al menos el 85%, aumentar la calidad y bienestar del pollito, mejor uniformidad, y rendimiento post nacimiento.
Se trata de la X-Streamer, una incubadora inteligente que transforma los datos que están en la máquina, en un máximo rendimiento de la planta de incubación, a través de una combinación integrada con tecnología “Embryo-Response Incubation”.
“Cuando la temperatura es muy alta, la X-Streamer emite información al cerebro de la máquina, y la temperatura se adapta mediante un sistema de refrigeración emitida por la misma computadora”, explicó Verhelst.
Adicionalmente, el programa informático permite una adecuada trazabilidad, aumenta el rendimiento, combina datos del lote, programas de incubación, facilita el uso y permite aplicar procedimientos de seguridad.
El software inteligente dimensiona de manera automática a los huevos que están a bordo de esa máquina y si se trata de un producto óptimo. Con esa información guía, el usuario puede tomar decisiones adecuadas para lograr mejores resultados en el proceso de incubación.
El X-Streamer tiene tres funciones adicionales: una biblioteca para programas de incubación ampliada, asistente de carga y transferencia, y tecnología interconectada entre la incubadora y la nacedora.
La biblioteca maneja perfiles de diferentes aves del lote, y el software puede sugerir al usuario de manera automática el perfil óptimo. Esto evita al operario elegir el programa en función del ave, de la raza o el lote. “De esta manera logramos un control perfecto para cada lote de huevos”, aseguró.
El asistente de carga y transferencia predefine la posición exacta de cada lote, y determina la nacedora a la que deberán transferirse los huevos. Este elemento también excluye el riesgo de cometer errores.
Basándose en la información sobre los huevos fértiles, el software entrega al operario información automática y programación precisa para cada lote de huevos, y así puede sugerir un programa adaptado para lotes viejos; y si son jóvenes, un programa de incubación para jóvenes.
“Por ejemplo, la X-Streamer sabe que todos los huevos a bordo están entre 55 y 58 semanas, y puede aconsejar al operario un programa de incubación para lotes viejos, y si están entre 37 y 32 semanas sugerirá un programa de incubación para lotes jóvenes”, aclaró, Verhulst.
La información le ayuda y le facilita la labor al productor, sea cual sea su nivel de producción, además que genera un mejor resultado de incubación y reducción de los costos operativos, y beneficios económicos duraderos.
La incubadora de alta tecnología está diseñada para generar bioseguridad con entorno hermético, y el costo de mantenimiento es mínimo, pues está fabricada con materiales duraderos.