Aunque aún no se han cuantificado las pérdidas económicas, la mortalidad por cuadros de pullorosis y tifosis aviar por salmonella pueden generar una afectación significativa en los índices productivos. El Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) calcula que estos porcentajes pueden oscilar entre 10 y el 80%.
Un estudio conjunto desarrollado entre 2018 y 2020 por el ICA, la Asociación Académica Santandereana de Patología Aviar (ASPA), y la Federación Nacional de Avicultores de Colombia (FENAVI), a la “resistencia antibacteriana de las muestras positivas a salmonella”, identificó que las bacterias de salmonella, que fueron aisladas en tres años, presentaron alta sensibilidad a los antimicrobianos.
Ivonne Hernández, doctora en bacteriología del Laboratorio Nacional de Diagnóstico Veterinario del ICA, explicó que más del 90% de las aisladas mostraron una resistencia a la gentamicina, y lincomicina; entre el 51 y el 49% fueron resistentes a la tetraciclina, y el 40% fueron resistentes a la ampicilina y a la colistina.
Alertó que los antibióticos contra la salmonella, que mostraron un resultado intermedio, son un riesgo porque en algún momento, el mal uso o la mala dosificación, puede ocasionar que la bacteria se vuelva resistente. Hay que reducir los valores intermedios para que la salmonella baje la sensibilidad, sugirió.
“No sabemos aún cuál es el mecanismo de defensa que presente la salmonella aviar a esos antibióticos, pero lo que sí se apreció es una resistencia marcada a la gentamicina, y a la lincomicina”, señaló.
Los estudios deberán valorar la acción del antibiótico que al mismo tiempo permitirá disminuir la bacteria. Esos antibióticos están en proceso de evaluación.
Hernández recomendó continuar con el análisis de los resultados para conocer el comportamiento de los antibióticos que permitan atacar la salmonella. Sin embargo, esta experta puntualizó que el comportamiento y el resultado de un antibiótico, puede ser diferente en varias regiones.
Para detectar la susceptibilidad de algunas salmonellas a varios antimicrobianos, el estudio del ICA, de FENAVI y de ASPA, escogió 100 clases de salmonellas entre 2018, 2019 y 2020 que fueron conservadas en congelador, a una temperatura de 70 grados.
¿Cómo se seleccionaron los antibióticos? Hernández detalló que se analizó un grupo de antibióticos empleados en infecciones por salmonella, y finalmente se escogieron 30, entre ellos la penicilina, aminoglucósidos, fosfatos, quinolonas.
Las pruebas de laboratorio se enfocaron en la calidad, y los resultados fueron avalados en base a normas de bioseguridad. Es una técnica que analiza hasta qué punto el antibiótico produce un resultado, y así conocer si la bacteria es sensible, intermedia o resistente.
La pullorosis es una infección que se transmite a través de los huevos y está caracterizada por diarrea blanca y alta tasa de mortalidad.
La tifosis aviar es una enfermedad septicémica específica de las aves, causada por salmonella gallinaru.