En 2019 se produjeron 280 millones de pollos, que representaron 535 mil toneladas métricas de carne, mientras que en 2020 se criaron 253 millones de pollos, que significaron 477 mil toneladas métricas de carne. La irregularidad se debió a la pandemia.
La proyección para el 2021 es mantener la misma cantidad o incrementar entre cinco y siete mil toneladas de carne de pollo. Todo dependerá de la importación de reproductoras que procedentes desde Brasil, llegarán hasta abril.
En huevos, la producción en 2019 fue de 14,5 millones de aves ponedoras y en 2020 se redujo a 12,6 millones.
Al comienzo de la crisis sanitaria, el precio del pollo estaba en un dólar, pero disminuyó a 0,80 y a 0,85 centavos la libra a nivel de productor. En noviembre se comercializó en 0,44 centavos la libra, pero en diciembre se mantuvo entre 0,65 y 0,70 centavos.
En marzo de 2020, el precio del huevo superó los tres dólares por cada cubeta de 30 unidades, pero al finalizar el año se vendió entre 2,60 y 2,70, a nivel de productor.
“Es difícil cuantificar las pérdidas totales, pero sí dejamos de producir alrededor de 30 millones de pollos, significa 120 millones de dólares, en promedio. Las empresas medianas y grandes, lograron solventar las pérdidas. El mayor golpe fue para los medianos y pequeños productores”, indicó Édgar Navarrete, presidente de la Corporación Nacional de Avicultores del Ecuador (Conave).
El consumo per cápita de carne de pollo que subía significativamente en los últimos años, bajó en el 2020. En el 2019 llegó a 32 kilos por persona al año y en el 2020 disminuyó el consumo en 7 kilos. En el 2021 prevén la subida de medio kilo. En huevos se llegó a un consumo per cápita de 225 unidades, mientras que en el 2020 descendió a 196 huevos.
Compromiso del próximo Gobierno
Según Navarrete, ante la falta de liquidez en el mercado, lo ideal sería bajar el precio de la carne de pollo y de los huevos, pero el costo del maíz les impide cumplir con esta aspiración.
A mediados de enero, el quintal se adquirió en 22 dólares; es decir, 480 dólares la tonelada, mientras que en Colombia y Perú se consigue en 220 y 240 dólares igual cantidad.
“La solución sería que las autoridades permitan la importación de maíz o que se respete el precio oficial de 14,60 dólares el quintal. El precio del maíz nos limita en competitividad, por aquello al sector no le favorece el acuerdo comercial de la Alianza del Pacífico”, expresó.
El sector solicita al nuevo Gobierno un precio justo del maíz, controlar el contrabando y que les dejen trabajar. “Anhelamos exportar carne de pollo, pero debemos mejorar los procesos sanitarios y de competitividad. En el primer caso, el sector coordina con Agrocalidad, para buscar áreas libres Newcastle, principal impedimento para exportar el producto”.
En lo que respecta a la producción de pavos, en el 2020 se produjeron 12 mil 800 toneladas. Siendo esta la misma cantidad de los últimos años. En 2020 hubo menos demanda y los pavos que no se vendieron pueden permanecer congelados durante un año.
Para elevar el consumo de productos avícolas, Conave desarrolla campañas de promoción sobre los beneficios nutricionales de estos alimentos