Para lograr mayor desarrollo, los bananeros requieren un marco regulatorio en función de las nuevas exigencias de sostenibilidad y competitividad de los mercados internacionales
El sector bananero ecuatoriano creció un 7% en relación a 2019. A nivel de enfunde (capacidad de producción), aumentó el 3,7% y se produjo, en promedio, 380 millones de cajas de banano, indicó José Antonio Hidalgo, director Ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Banano de Ecuador (AEBE).
“El 2020 fue un año que puso a prueba nuestra capacidad de innovación, resiliencia y unión, aunque nos enfrentamos a un enemigo invisible como la Covid-19, fortalecimos las medidas de bioseguridad, para que las exportaciones no se detengan. Se trabajó en equipo con todos los actores que conforman la cadena de valor, enfocados en la competitividad y sostenibilidad, tanto en lo social como en lo ambiental”, expresó.
Los desafíos del sector continúan, a pesar del permanente incremento de costos, de la excesiva presión fiscal, la falta de agua en Santa Elena, y la ausencia de acuerdos comerciales con China, Japón, Corea y la zona asiática, que colocan al sector en desventaja frente a sus competidores.
A esto se suma, la presencia de nuevas enfermedades, como el Fusarium R4T, que produce el marchitamiento y muerte de las plantaciones de la fruta. Ventajosamente, esta enfermedad que no tiene cura, todavía no llega al país, pero el hongo ataca a las plantaciones ubicadas en Colombia. Los productores ecuatorianos incrementaron las medidas de bioseguridad y solicitan mayores investigaciones para encontrar una solución a esta patología.
Metas para 2021
Para lograr un mayor desarrollo del sector, Hidalgo solicitó a las autoridades la actualización del marco regulatorio para el sector bananero, pero en función de las nuevas exigencias de sostenibilidad y competitividad de los mercados internacionales.
El 40% de las exportaciones que se dirige a EE.UU. y Europa no tuvo afectación en precios, pero sí en los mercados más volátiles, como Medio Oriente, Rusia y Asia, donde se generó una crisis de precios por los niveles de producción en todo el mundo.
Durante la pandemia, la fruta se vendió a la Unión Europea, a Rusia, a Medio Oriente y a EE.UU.. Para el 2021, el sector anhela que, entre el 6 y el 8% del banano exportado, tenga como destino el mercado asiático.
Los bananeros proyectan un fortalecimiento en los mercados existentes y mantenerse competitivos. “La política verde europea tiene mayores exigencias para la fruta, por eso tenemos que readaptarnos a la dinámica de los mercados externos. Queremos mayor competitividad y sostenibilidad, pero necesitamos un entorno regulador”, destacó Hidalgo.
Dato
- Las exportaciones bananeras le significan al Estado divisas por alrededor de 3 mil 200 millones de dólares. El sector aporta con cerca del 3% del PIB general y el 7% del PIB agropecuario.