Cuando se emplean antibióticos es importante que el avicultor se fije en que la molleja del ave tenga un adecuado desarrollo.
La prioridad en la alimentación del broiler, a escala mundial, es desarrollar piensos sin antibióticos. Esta fue la recomendación a los avicultores por parte de Gonzalo González, licenciado en Producción Animal por la Universidad Politécnica de Madrid, y doctor en Ciencias Veterinarias por la Universidad de Barcelona, durante el seminario “Nuevos avances en la alimentación de aves, con énfasis en nutrición mineral”.
Explicó que cuando se usan piensos (producto de la conversión de materias primas de origen agrícola, subproductos y aminoácidos en alimentos para la producción de carne de pollos, huevos, etc.) sin antibióticos, baja la proteína bruta, y aumenta el uso de aditivos que no sustituyen a los antibióticos.
“La molleja es el órgano director del aparato digestivo del pollo, y permite un mejor desarrollo del tracto gastrointestinal. Si la molleja no funciona hay serios problemas; si el director de la orquesta falla, la orquesta funcionará mal”, afirmó.
Con este símil, el conferencista exhorta a una preocupación fundamental con respecto a este importante órgano del ave.
En esta conferencia, auspiciada por la corporación NOREL, González planteó la interrogante ¿Es mejor usar gránulo o harina gruesa? En el caso de que se decida usar antibióticos, el gránulo tiene ventajas sobre la harina.
El gránulo es mejor aprovechado por el ave y le ayuda en su crecimiento y conversiones en los primeros 15 o 20 días de vida. Sin embargo, alertó que la granulación no mejora la digestibilidad del pienso porque además se reduce la producción de enzimas.
Nutrición mineral
Explicó que el calcio grueso permanece más tiempo en la molleja de las ponedoras y coadyuva a su desarrollo, otorga mejor digestibilidad, y fluidez en la estructura del pienso en la harina. No obstante, afirmó que el calcio es el nutriente más caro en piensos para todo tipo de animales monogástricos (aves y cerdos).
“Es el más caro porque la gente emplea más calcio de lo que necesitan los animales; cuanto menos calcio se utilice, es mucho mejor”, apuntó González, al aclarar que el calcio granular tiene mejor digestibilidad en los pollitos, que el calcio en polvo, y puede utilizarse a partir de las 16 semanas de vida, pues mejora la calidad de la cáscara.
Por otro lado, destacó que los minerales traza se utilizan en los procesos metabólicos de enzimas, aunque presentan problemas de absorción reducida, formación de complejos insolubles, hasta contaminación ambiental con potencial tóxico.
Los minerales traza se clasifican en inorgánicos (sales minerales), y orgánicos (complejos, quelatos, proteinatos, glicinatos). La ventaja de su empleo radica en que los minerales orgánicos son biodisponibles, permiten una absorción directa, y dan vía libre a la interacción con otros productos.
Beneficios de quelatos
Fertilidad y calidad de semen
Calidad de la cáscara en gallinas viejas
Evita cojeras y procesos de osificación