El incremento de costos por concepto de materias primas para la fabricación de balanceado bordea los 50 y 70 dólares por tonelada. No existe materia prima que no haya subido de precio a raíz de la pandemia.

En los últimos meses es notoria la disminución de alimento balanceado para la industria alimenticia, debido a que se ha visto afectado el consumo de carne de pollo y cerdo por la falta de recursos económicos de la población. La alerta la puso Ernesto Freire, director de la Asociación de Fabricantes de Alimentos Balanceados para Animales (AFABA).

En medio de esta crisis, Freire consideró que el consumo de huevos se ha logrado mantener por ser un producto más económico. Un huevo es accesible para todos, aunque su costo de producción, así como de la carne de pollo, ha aumentado por los acontecimientos que ocurren en Colombia.

Respecto a la baja demanda de carne de pollo, los productores señalan que están alimentando menos animales, lo que ha conllevado a una merma productiva. Además, este producto requiere de la cadena de frío por lo que la movilización de esta proteína se vuelve complejo.

Según Freire, en los costos del maíz importado, el arancel es variable: se ubica entre el 40 y 45% dependiendo de la zona de franja de precios y de la temporada. Consideró que el precio oficial de 14.60 dólares, dispuesto por el MAG, no está siendo respetado. Dijo que “la aspiración es que se mantenga ese precio, aunque las circunstancias son otras”.

En la provincia de Los Ríos se registra un 70% de la cosecha; en Manabí bordea el 20% de producto cosechado, en la zona de Pindal, en la provincia de Loja, la cosecha sigue creciendo, pero las fuertes lluvias ocasionan que el grano, en la fase de maduración, se pierda. La cosecha de la Amazonia sale entre enero y febrero, en porcentajes muy limitados porque los productores no tienen tecnología.

Insistió en que la industria no puede abastecerse por la falta de recursos y los altos costos de la materia prima. Ante este escenario, El sector deberá solicitar al Gobierno que autorice la importación de materia prima porque el país no puede quedarse desabastecido de productos de primera necesidad.

En el sector avícola y porcícola, el aceite de palma es tercero en orden de importancia para la fabricación de alimentos por su aporte de grasa y energía que requieren los animales para sus funciones vitales.

En este año, como consecuencia de la plaga “pudrición del cogollo” existe desabastecimiento de este ingrediente. El costo de la tonelada bordea los mil 200 dólares, comparado con los 650 y 700 dólares del año pasado.

Es fundamental el aporte de aceite de palma en la formulación del balanceado, pero se torna complicado reemplazar por otra oleaginosa, por la falta de infraestructura en el país. Los micro elementos como enzimas, atrapantes de micotoxinas, vitaminas, minerales, etc. también han sufrido incrementos que impactan en los costos de producción.