El exceso de calcio es negativo y reduce el crecimiento de los cerditos, advirtió Hans H. Stein, PhD en nutrición, durante su conferencia “La digestibilidad de calcio y fósforo en cerdos”.

El error que se comete en muchas dietas -dijo- es que tienen un alto contenido de calcio en lugar de emplear otro tipo de fórmulas como maíz, y harina de soya. La digestibilidad en los cerditos puede ser evaluada en el intestino delgado, y actúa de manera casi similar cuando se miden los aminoácidos.

Detalló que de acuerdo con un experimento desarrollado en laboratorio con “permeato de suero normal” y “permeato de suero bajo en ceniza”, este último solo tenía el 10% de fósforo, mientras que el permeato convencional tenía más del 70%. “Estos son ingredientes parecidos; la única diferencia es que el permeato bajo en ceniza tiene menos fósforo que el ingrediente normal”, explicó.

El expositor que también es profesor de Nutrición en el Departamento de Ciencias Animales en la Universidad de Illinois (Estados Unidos), sugirió usar la fitasa que contiene ingredientes como maíz y harina de soya.

“Cuando se usa la fitasa la digestibilidad mejora hasta en un 60%; es decir, su efecto es muy bueno. La fitasa libera altos porcentajes de calcio y fósforo”, puntualizó. El calcio no solo se encuentra en suplementos inorgánicos, sino incluso en ingredientes de plantas, y en proteínas de animales.

Explicó que al final de uno de los experimentos, que duró 21 días, el peso medio de los cerdos era de 22,4 kilogramos, y así los investigadores determinaron el rendimiento del crecimiento de los cerdos.

Específicamente, cuantificaron el peso corporal final, el promedio de ganancia diaria, la relación ganancia con alimentación y la incorporación de los minerales en el hueso. El equipo también analizó los patrones de expresión génica y encontró más fugas de calcio en el intestino, cuando el mineral se alimentaba en exceso.

Relación ganancia - consumo

Stein concluyó que una sobrealimentación con calcio puede ocasionar en la industria bajos niveles en la relación ganancia - consumo. Indicó que hay algunas fuentes de calcio en la dieta, como las premezclas vitamínicas que utilizan el calcio como portador.

Para corroborar su hipótesis, añadió que un estudio europeo determinó que las dietas de los cerdos contienen un promedio de 0,22% más de calcio que el indicado en la etiqueta del producto. Por otro lado, es poco probable que las dietas comerciales proporcionen un exceso de fósforo.

Este no solo es uno de los nutrientes más caros, sino que también puede causar daños ambientales cuando se excreta en la orina y el estiércol, aseveró.

“La cantidad de calcio en las dietas de los cerdos debe calcularse con precisión, ya que un exceso de este mineral puede disminuir la digestibilidad del fósforo y la ingesta de alimentos, lo que conduce a un menor aumento de peso en los cerdos”, remarcó.