“La principal causa de pérdida de peso seco y de calidad son los hongos. En las plantas de acopio debe existir un sistema organizado, coordinado y programado”, son las aseveraciones de Domingo Yanucci.
La mayoría de plantas de acopio son tradicionales. Esto genera una serie de problemas para los granos, para el inversionista y el medio ambiente. Hay plantas tecnificadas y muy pocas entraron en la postcosecha de precisión. Para el experto argentino Domingo Yanucci, la solución es migrar de las plantas tradicionales a las modernas.
Un informe de la FAO de 2011 señala que todos los años, un tercio de los alimentos producidos para consumo humano, se pierden o se desperdician.
Las altas pérdidas que se producen en los procesos de postcosecha afectan la calidad del producto, ponen en peligro el funcionamiento de la infraestructura, la seguridad de los empleados, etc. Por eso es primordial invertir en el manejo y en procedimientos de postcosecha.
La FAO sugiere que, para reducir las pérdidas y desperdicios de alimentos se debe incorporar tecnología, innovación, capacitación al personal, recopilación de datos, implementación de buenas prácticas e inversiones en materia de infraestructura y capital, para mejorar la eficiencia de las plantas de acopio.
Fundamental el diseño
- Debe tener todos los servicios para lograr eficiencia.
- Tener simultaneidad: realizar varios trabajos al mismo tiempo.
- Flexibilidad: que el grano pueda seguir distintos caminos de acuerdo a su condición.
- Capacidad correctiva: facultad de clasificación, de mezcla, de monitoreo.
- Capacidad de ampliación, entre otros factores.
Yanucci señaló que también es vital un monitoreo de los granos, conocer mejor los procesos y la mercadería. “Cuando existe más frío disminuye la humedad, se elimina la pérdida de calidad y se reduce la presencia de hongos e insectos. La solución es la postcosecha tecnificada”.
Cada día se debe buscar más eficiencia. “Estamos realizando estudios para el empleo de células fotovoltaicas (paneles solares), para generar energía eléctrica propia”, adelantó.
En los últimos diez años se incorporó la postcosecha de precisión, que implica mayor tecnología de monitoreo, de automatización e información en tiempo real, así como conocer mejor los procesos y la mercadería.
En los últimos diez años se incorporó la postcosecha de precisión, que implica mayor tecnología de monitoreo, de automatización e información en tiempo real, así como conocer mejor los procesos y la mercadería.
En la postcosecha de precisión hay menos pérdidas y mayor rentabilidad porque reduce la pérdida de peso y de calidad. La práctica más importante son el muestreo y el monitoreo, “caso contrario se presenta ineficiencia”, indicó.
“Ninguna planta de silos o menos del 5%, tienen un sistema de muestreo dentro del proceso, lo que refleja que existen instalaciones obsoletas. Lo bueno es que hay una evolución de postcosecha tradicional a tecnificada y actualmente, a precisión”, refirió.
Planificación
Entre los principales aspectos a tomar en cuenta constan: lugar de las instalaciones y objetivos, estructura y organización, normas de comercialización, mantenimiento de peso, calidad, economía y costos.
Deben lograrse objetivos como asegurar la compra de granos de interés, proporcionar un nuevo servicio al cliente, disminuir los costos logísticos, incrementar el marketing, etc.
Además, son fundamentales los recursos disponibles, como: caminos, energía eléctrica, servicios de abastecimiento, comunicación, un centro de salud y de bomberos, condiciones edáficas y climatológicas, normas y legislaciones vigentes para cada lugar y país.
Mercados a atender
Cada planta de acopio genera una zona de influencia, que depende del tamaño, de la región, de la competencia, etc.
Las bases de la postcosecha son: operación, personal e información. La operación debe mirarse desde la óptica de la eficacia (calcular los gastos). Este proceso depende de la infraestructura y del desarrollo tecnológico de la empresa. Una de las prácticas fundamentales también es la prelimpieza, que ayuda a la porosidad, aireación, control de plagas, secado, zarandeado, conservación, seguridad, etc. No obstante, muchas plantas de silos no cuentan con estos servicios.
Las bases de la postcosecha son: operación, personal e información. La operación debe mirarse desde la óptica de la eficacia (calcular los gastos). Este proceso depende de la infraestructura y del desarrollo tecnológico de la empresa. Una de las prácticas fundamentales también es la prelimpieza, que ayuda a la porosidad, aireación, control de plagas, secado, zarandeado, conservación, seguridad, etc. No obstante, muchas plantas de silos no cuentan con estos servicios.
Recurso humano
El personal encargado de la planta es el más importante en su funcionamiento. Debe estar capacitado y tener experiencia, disponer de un perito acreditado, personal de mantenimiento y administrativo.