La economía mundial se ve afectada por la aparición del virus Covid-19 y el sector camaronero ecuatoriano no es la excepción. El camaronero Danny Vélez, Gerente de BioMar señala que las tasas de decrecimiento se reflejarán en cada país.
Cuando surgió el problema, China se aprestaba a celebrar el Año Nuevo, pero todas las actividades se suspendieron, por lo cual el consumo de camarón ecuatoriano disminuyó.
China compra a Ecuador un 60% de camarón y el 40% se vende a otros países. Por este motivo, los congeladores estaban llenos y no se podía exportar a ese país. Al quedarse bloqueado este mercado hubo la sobreoferta y el precio del producto, bajó.
Pese a las circunstancias, el sector camaronero seguirá con su producción. Vélez manifestó que enero de 2020 fue un mes positivo, pero en febrero se comenzó a sentir la afectación del virus. Actualmente, “el sector no se encuentra en su mejor momento, pero hay que tener paciencia”.
Agregó que el ingreso de tecnología y de nuevas empresas a la actividad suman y benefician al sector. Sin embargo, indicó que este crecimiento es por iniciativa y trabajo del sector privado, porque del Estado solo recibieron el diferimiento arancelario de la soya.
El problema también radica en el cambio permanente de autoridades, a quienes se les debe explicar los procesos, y eso significa un rompimiento de la cadena de conocimiento.